
Agarre una cámara por primera vez a los 13 años y, desde entonces, me han fascinado las historias que las personas comparten. Me atraen sus perspectivas, sus pasiones y lo que las impulsa. Los retratos son mi principal enfoque, pero también disfruto capturando bodegones (Still Life), arquitectura y espacios diseñados.
Para mí, la fotografía consiste en revelar carácter y presencia, ya sea en un rostro, una habitación o un simple objeto. Busco que mis imágenes transmitan la belleza, la emoción y la energía que reside en todo lo que encuadro.